El Porteñito (Pesce)
Cuando se habla de esta época, compadre,
sabrán
del taco militar y del Massera.
Dirán
¡Ah, tiempos del ayer, quién los viviera!
¡Qué pintoresco fue Buenos Aires!
De los taitas de cambrona con trensilla
saldrán a relucir hazañas de guapeadas,
y de
las grelas de percal enfaroladas
se harán las mentas en la tierra en que nací.
He nacido en Buenos Aires
se me apoda el Porteñito,
no tolero los desaires
de matones y compadritos.
Sé florearme en el piropo
con las paicas más diqueras
y me gusta entrar al copo
del honor en la amistad.
En los bailes del Victoria,
El Tambito y lo de Laura,
me lucí entre los tauras
emulando al Cachafaz.
Mozo bravo y bailarin
tengo fama de trovero,
y en las noches de verbena
siempre salgo echando buena
con la reina del festín.
Del tranvía de caballos trotadores
y del
farol y el organito callejero
con fiel
imagen el recuerdo hablará un día
de estas lindezas que tanto quiero.
Y en la historia de esta era floreciente
verán
que Dios hizo el milagro de esta tierra
de paz
de amor y de trabajo, noblemente,
orgullo inmenso de mi criollo corazón.