Tocado, Hundido
Otra vuelta de noria más,
otra primavera más,
y él más viejo,
y cada vez le vivifica menos,
es la noria que hace vomitar.
Tocado, hundido, se acabó,
todo se desmoronó.
Desde que cayó en desgracia,
que es como caer preso,
la mala racha se le cebó.
Y es entonces cuando salta algo dentro de él,
las paredes de su alma vuelven a reverdecer
con un musgo de esperanza cuando empieza a llover.
Sólo, sólo, sólo él,
como un globo sonda es,
y recibir en la cárcel cartas negras
acabó con él,
y hasta bajo tierra llegó a caer.
Las paredes de su alma vuelven a reverdecer
de ridícula esperanza, algo que quiere crecer,
el recuerdo de lo que era, y ya no más puede ser.
Un sueño se levanta, otro vuelve a caer.
(Lluvia de Mayo va a llover)
(Lluvia de Mayo va a llover)
Y si ella se muriera no tardaría más
de cinco minutos en matarse y terminar.
(Lluvia de Mayo va a llover)
Todo el mundo se reía de su tendencia a dramatizar
(Lluvia de Mayo va a llover)
hasta aquel preciso día en que le vieron al fin reventar.
(Lluvia de Mayo va a llover)
Las paredes de su alma vuelven a reverdecer
(Lluvia de Mayo va a llover)
con un musgo de esperanza cuando empieza a llover.
(Lluvia de Mayo va a llover)
Un sueño se levanta, otro vuelve a caer.
(Lluvia de Mayo va a llover)
El recuerdo de lo que era y ya no más puede ser.