Ahora
Ahora, ya no escribo cuentos
Ni tacho los días del calendario
Ni sueño que estoy preso
A la sombra de un jardín vallado
Ya no paseo por el mercado
Ni escucho lo que hablan unos viejos
En un banco sentados
Nunca más me sentare con ellos
Ahora me paso todas las tardes pensando
Que el teléfono no arde, que no suena
Que no interrumpe la cena, que no arde
Que me dice que me largue, que se muere
Sálvame tú si puedes
No me susurran ya las fotografías
Se apagaron los gritos de su silencio
De su melancolía, ya no más
Ya no quiero más sueños
Ahora me paso todas las tardes, pensando
Que el teléfono no arde, que no suena
Que no interrumpe la cena, que no arde
Que me dice que me largue, que se muere
Sálvame tú si puedes
Que no suena
Que no interrumpe la cena, que no arde
Que me dice que me largue, que se muere
Sálvame tu si puedes
Si es que por no salir todas las puertas cierro
Y tengo las mañanas solo para mi
Se olvidaron de mí, estos del infierno
Y cuanto vale el precio?
No paran de llover las nubes del fracaso
Disparan las pistolas de la soledad
Ya no salgo en la guía ni en la calle de olvidados
Gritaré un poco más, sangrará mi garganta
La pared con mil huellas de mi loca cabeza
Ahora no puedes entrar estoy ordenando mi casa
Estoy ordenando mi casa
Estoy ordenando mi casa
Yo gritaré un poco más, sangrará mi garganta
La pared con mil huellas de mi loca cabeza
Ahora no puedes entrar estoy ordenando mi casa