Cleta Dominga
Afuera de su cabaña,
ya casi al amanecer,
una negrita pequeña
tenía el capricho de ver,
de ver brillar en el cielo
la luna tropical,
esa luna de nacar
redonda maraca
que sale del mar.
La negrita Cleta Dominga
curucutí, curucutá
quiere ver que salga la luna,
curucutí, curucutá
pero estaba el cielo nublado.
curucutí, curucutá
Me atormenta verte llorando,
no llores negra que ya saldrá.
Me atormenta verte llorosa.
Hey primorosa no llores más!
Y como en boca de lobo
la obscuridad se cerró,
sin un clarito en las nubes,
ni tan siquiera un tirón.
Más la negrita esperaba,
no hacía más que esperar,
a esa luna de plata
que sale temblando
mojada del mar.
La negrita Cleta Dominga
curucutí, curucutá
quiere ver que salga la luna
curucutí, curucutá
pero estaba el cielo nublado.
curucutí, curucutá
Me atormenta verte llorando,
no llores negra que ya saldrá.
Me atormenta verte llorosa.
Hey primorosa no llores más!