Las Espinas

¿De qué estará hecho un corazón?
El mío de simple cartón, el tuyo de mármol pulido.
Yo que he crecido con un caparazón
y tú te ríes de mí y de mi rabia, es lo justo.

He pasao mucho tiempo pensando que era mi culpa
pero me doy el gusto, me voy a indultar.
No me gusta el terciopelo tapando mis clavos
igual que odio analizar mis grietas en el lavabo.

Así que ahora que sé o más bien dudo
si mi corazón es de oro o lo he teñido de dorado,
voy asumiendo que te decidieras por robo.
Sigues siendo un mísero trozo de plomo.

Ya no soy yo mismo, qué más quisiera.
Fiel titiritera de los perdidos,
¿te conoces mis lunares o te los inventas?
¿Te conoces mis arrugas o las surfeas?

Te sabes el feel de mi llanto,
pero y qué con mi risa.
Primero lo bueno, luego el desencanto.
Yo que antes confundía tu voz con la brisa.

Qué vas a saber de amar si te cargas los lirios
y tus flores favoritas son las rosas.
Yo pensaba que yo era la víctima de tus delirios
pero de sus espinas te haces la corona.

No sé dónde pretendías reinar
cuando tus pasos se tiñan de grana,
cuando en la plaza ya no canten las gitanas.
Es hablarte y hacer pleno en diana.

He pasado mucho tiempo pensando que era mi culpa
pero me doy el gusto, me voy a indultar.
No me gusta el terciopelo tapando mis clavos
o alguien me echa un cable
o no me voy a salvar.